Un cariño poco a poco. Un quiéreme poco a poco. Un desordena
mi corazón pero, poco a poco. El ámame pero sin prisa. Ese no hagas que las
manecillas del reloj vayan tan deprisa. Para el tiempo, mi vida. Páralo para sonreírme
una última vez antes de besarte.
No seas incauto, tómate el tiempo para acariciarme la
mejilla. Pasea tus dedos por mis labios júrale al reloj que le vamos a ganar la
carrera, que vamos a pararle, nosotros dos. Que si hace falta vamos a flotar.
Pero poco a poco, quiéreme poco a poco. Sigue los compases del tiempo en el
beso. Para un momento y respira de mí. Ganémosle la partida al tiempo.
Que un rato contigo sea lo más valioso, si de verdad el
tiempo es oro. Si de verdad vale tanto. Tengamos momentos tan increíbles que
nadie les pueda poner un valor. Guarda cada segundo, de despacio y de poco a
poco. Que signifique tanto como vale.
Sin prisa pero sin pausa, que dicen. A mí eso siempre se me ha dado muy mal, lo de parar el tiempo... Soy más de apresurarme, quemar y estallar. A ver si aprendo de ti :D
ResponderEliminarYo no soy maestro del poco a poco, soy más de romper y rápido.
ResponderEliminarNomino esta entrada como candidata a ser mi favorita: veamos que me encuentro cuando siga leyendo.
ResponderEliminar"Un cariño poco a poco. Un quiéreme poco a poco. Un desordena mi corazón pero, poco a poco."
Quizá yo hubiera terminado también con "poco a poco", pero estoy de acuerdo: que signifique tanto como vale.
Muy bien Jesús :D