domingo, 16 de marzo de 2014

Mensaje en la botella.





(Texto escrito para el concurso de turismodevino.com)


Estaba deleitándome con un vino de Navarra cuando sonó el teléfono. Me pasó el inalámbrico y me dijo: es mi madre. Dice que ha encontrado una botella con un mensaje tuyo.

Así el teléfono, ante la cara de incredulidad de mi esposa. Recuerdo aquella botella que mandé hace unas semanas guardar a la hermana pequeña de mi mujer en algún lugar remoto de aquella casa, con tintes de caserón de pueblo.

Aquel mensaje contenía uno de los poemas que había escrito, una de esas noches en las que el insomnio se apodera de las estrellas. Aquella botella, iba a ser uno de los regalos con los que pensaba obsequiarla para el aniversario de nuestra boda. Cinco años de casados más otros cinco de noviazgo. El poema que se encontraba dentro de la botella decía algo así:

Un segundo para inventarme
Un “te quiero” que te convenza.
Ya sabes de los de
lanzarte un beso después.

De los de no contar
previamente hasta tres,
antes de lanzarme
al abismo de tus rosados labios de fresa.
Agarrarte del brazo
y poner tu mundo del revés.
Y decirte entre silencios y susurros.
-Nena, no te marches.
Que sabes que soy, si tú eres.

Y que tu,
enseñándome esos hoyuelos,
Sostengas mi ego cuando te ríes.

Un segundo en la palma de tu mano.
Desear que sea Paris, Madrid o debajo de un Álamo
Pero que sea posado en los surcos
De esos de leer la vida, mi vida.

Por suerte siempre que hablaba por teléfono deambulaba por la casa, lo que me permitía explicarle a mi suegra el asunto del mensaje en la botella. Sin que mi mujer se extrañara de mi ausencia. Después de la conversación apuré la copa y me acurruqué sobre su pecho.

Cuándo preguntó que qué era aquello de un mensaje en la botella, le dije que era algo entre su hermana y yo. Con aquella respuesta no se extrañaría ya que a veces su hermana me llevaba a dar largos paseos por la playa para pedirme consejo. Aún así ella frunció el ceño, pero acto seguido me besó...

7 comentarios:

  1. Me gustó mucho, sobre todo ese último beso... :)

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  2. Es precioso, Jesús.
    Puede que al haberme cambiado el nombre ya no me reconozcas. O sí.
    Recuerda que debo compensarte las 500 vidas de abandono.

    Un abrazo.

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    1. Claro que se quien eres, aunque cambies de nombre. Lo recuerdo y no lo olvido.

      Un abrazo :D

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  3. ¡Sublime! De verdad, no he podido dejar de leer y me he enamorado de cada palabra de este texto :) Seguro que es de los mejores textos de ese concurso.
    Un abrazo y pásate si quieres por última entrada de despedida temporal del mundo blogger donde pido un pequeñito favor :3

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    1. Muchas gracias Utopía, visité tu blog y es una pena que lo dejes temporalmente. Esperoq ue vuelvas con más fuerza.

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  4. Jesús el texto y la esencia es bueno. No quiero darte lecciones porque tú sabes más que yo de esto. Pero no ganarás si no revisas, antes de publicar o enviar, tus faltas de ortografía y tus coletillas. Por ejemplo:el poema que se encontraba en dentro de la botella.
    A mi parecer tampoco dejas claro quien coge el teléfono y quién vio el mensaje; o por lo menos a mi parecer (quizá no lo he entendido)
    Se que podría ser muy bueno. Corrijo, es bueno. Pero las faltas me desconcentran de la esencia del texto.
    Eso, o tal vez soy yo demasiado tiquismiquis.

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